El día de ayer los miembros del Ejército Mexicano mataron a 14 presuntos sicarios en los campos entre Samalayuca y Villa Ahumada. Estamos muy de acuerdo que como ciudadanos debemos respaldar las acciones del Ejército y agradecerles que arriesguen sus vidas por el País. A la vez, debemos honrar al soldado que aparentemente murió. No tengo la menor duda de que actuaron de la manera que era necesario aunque esto haya resultado en la muerte de estas 14 personas que justo acababan de asesinar a otros 6 hombres. Sin embargo, la noticia provocó una respuesta de alegría y hasta fiesta entre los lectores del Diario de Juárez. El comentario general era en el sentido de que era muy bueno que se acabara con esa “lacra” (esta fue la palabra predilecta de los que comentaron).
Aunque este suceso es una victoria para el Ejército Mexicano y una derrota para las fuerzas del mal, debemos reconocer que la muerte nunca debe ser motivo de fiesta o alegría. Es lamentable que esta gente vinculada al narcotráfico ande haciendo lo que anda haciendo. Ejecutando personas todos los días, haciendo un espectáculo público de su prepotencia e impunidad. Matando inocentes porque se atravesaron en su camino y en general jactándose de hacer todo tipo de mal. Todo mundo sabe que iban a terminar como terminaron; sin rendirse, implacables y arrogantes cayeron bajo las balas de los soldados que en este caso demostraron no solo ser mejores sino, tal como lo establece la Biblia, agentes de la justicia divina. Pero aún así, todo esto debería llevarnos a una sobriedad muy profunda y a un lamento por el derramamiento de más sangre, aunque haya sido de probables sicarios. Estos hombres debían ser traídos a justicia, pero Cristo dice que no desea la muerte de ningún hombre, sino su arrepentimiento.
Démonos cuenta de lo que está sucediendo en nuestro País. Esto no debería estar pasando. ¡México no debería ser un País en donde 14 hombres armados llegan a un poblado y levantan a 9 personas para ejecutarlas! Que luego llegue el Ejército y los sorprenda y los sicarios recojan las consecuencias de sus crímenes no elimina la pena de darnos cuenta la condición de nuestro País. ¿Se hizo justicia? Tal vez, solo Dios lo sabe. Pero cómo hubiera querido que este incidente ni siquiera nos lo hubiéramos imaginado posible. Para mí no es motivo de alegría, sino de pena. Pena por México, pena por mi País, mi estado y mi ciudad que ya cuenta los días en base a la cantidad de muertos.
Le sigo pidiendo a mi Señor que establezca su justicia firmemente en nuestro País, pero junto con ello le pido que en su ira, se acuerde de tener misericordia. ¡Oremos por un México de legalidad y justicia en donde reine el temor de Dios!
"En nombre de Cristo os rogamos: ¡Reconciliaos con Dios!" - 2Cor 5:20
Nuestro Propósito
Este es un espacio para publicar artículos desde una perspectiva Cristiana que motiven a los habitantes de nuestra Ciudad a reflexionar sobre su respueta a la crisis de violencia y crimen que azota a nuestra ciudad.
Es un llamado a buscar de Dios en humildad y arrepentimiento a responder conforme a su Palabra en estos tiempos.
Es un llamado a que no desfallezcamos, sino que respondamos a todo este mal con fe, esperanza y amor.
Joel 2:13 ...volved ahora al SEÑOR vuestro Dios, porque Él es compasivo y clemente, lento para la ira, abundante en misericordia, y se arrepiente de infligir el mal. 14 ¿Quién sabe si volverá y se apiadará, y dejará tras sí bendición...
Es un llamado a buscar de Dios en humildad y arrepentimiento a responder conforme a su Palabra en estos tiempos.
Es un llamado a que no desfallezcamos, sino que respondamos a todo este mal con fe, esperanza y amor.
Joel 2:13 ...volved ahora al SEÑOR vuestro Dios, porque Él es compasivo y clemente, lento para la ira, abundante en misericordia, y se arrepiente de infligir el mal. 14 ¿Quién sabe si volverá y se apiadará, y dejará tras sí bendición...
El otro dia platicando con un integrante de un cuerpo policiaco me decia que ya estaban desesperados porque no podian combatir con todos
ResponderEliminarlos narcotraficantes y demas sicarios. Todo esto rebasaba a sus fuerzas , es mas lo vi como frustrado sin esperanza de nada.
Me quede pensando en lo que me dijo y me preguntaba a mi mismo ...entonces quien nos cuidara? Tendre la confianza en algun cuerpo policiaco cuando ellos mismos se confiensan imposibilitados para terminar con toda esta ola de violencia?? mmmm!! esa fue mi respuesta momentanea.
Pero ya meditando todo esto, saque a conclusion una cosa : Mi trabajo es preocuparme por lo posible y DIOS HARA LO IMPOSIBLE.
Cual es la cosa posible de la que hablo?? Pues
ponerme de rodillas y orar intercediendo por mi
Pais, por mi estado , por mi Ciudad, por los sicarios, por mi familia, por mi iglesia, en otras palabras por TODO Ciudad Juarez teniendo Fe de la respuesta de Dios.
Cuando yo haga posible esto, entonces Dios hara lo que a nuestro juicio humano es imposible.
Si Dios obra con la peticion de un solo cristiano, se imaginan si hacemos todos esto juntos y en bola? creo que Dios obraria en forma express....jeje...
Salmo 9:10
En ti confiarán los que conocen tu nombre, por cuanto tú, oh Señor, no desamparaste a los que te buscaron.
Mateo 28:20
… He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
Hebreos. 13:5
… Yo nunca te abandonaré ni te desampararé.
Salmos 94:22
… Mas el Señor me ha sido por refugio, Y mi Dios por roca de mi confianza.
Proverbios 14:26
… En el temor de Dios está la fuerte confianza; Y esperanza tendrán sus hijos.
AMEN HERMANOS??......!!AMEN!!
Yo creo que estamos como cuando Dios mando a Jonas a predicar a Ninive y Jonas se resistió porque el creyó que las personas de Ninive no merecían el perdón y la misericordia de Dios y como el sabia que Dios tendría misericordia de ellos por mas maldades que ellos tuvieran, Dios nos esta enviando a predicar de igual manera, es nuestro trabajo llevar la palabra de Dios a quienes lo necesitan escuchar, sigo pensando que todos los delincuentes,sicarios,secuestradores y demás necesitan compasión primeramente porque ellos quizás no conocieron otro tipo de vida mas que el que siempre les ensenaron otros que se nos adelantaron a nosotros, si hubiera habido alguien que se preocupara por llevar la palabra de Dios su historia hubiese sido diferente.Dios es muy fiel. hace algunos años mi esposo y yo conocimos una pareja de jóvenes y ellos tenían una vida muy equivocada, entonces comenzamos a llevarles a algunas reuniones de la iglesia a la que asistiamos en ese tiempo, ellos aceptaron a Dios en su corazón y su vida comenzo a cambiar pero poco después ellos terminaron por de nuevo alejarse y nosotros por cansarnos de la situación creo que ahí nosotros fuimos poco fieles, después de un tiempo que duramos sin verlos y cuando comenzo todo esto de las muertes entre narcotraficantes nos encontramos con el muchacho por casualidad en una tienda y vimos que su camioneta de reciente modelo tenia de imagen a la santa muerte, eso nos lleno de tristeza porque el tiempo que conocimos a ese joven pudimos darnos cuenta que tenia un corazón noble y que su vida había sido tan difícil desde su infancia y bueno pensamos que el ya se había perdido completamente. poco después nos enteramos que había sido acribillado de una manera muy terrible, nos dolió y creo que mas porque sentimos que no luchamos lo suficiente por acercarlo mas a Dios, luego de algunos meses me entere por un familiar de el que un día antes de ser asesinado, el había ido a una iglesia cristiana pidiendo ayuda, el quería dejar su vida y volver a los pies de Cristo. y aquella tarde el se arrepintió y estoy segura que Dios le perdono y le recibió de nuevo, esa noticia para mi fue maravillosa porque una vez mas pude ver como Dios es fiel nosotros no pero el nunca deja de ser fiel, y su palabra nunca regresa vacía, nuestro trabajo es sembrar la semilla lo demás, lo hace Dios.
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